Los 10 policías acusados de torturas en una comisaría de San Ignacio fueron absueltos por la justicia. Su abogado asegura que “los efectivos actuaron correctamente”.

Un par de semanas atrás publicábamos la noticia de los diez policías que estaban siendo juzgados por torturas, severidades agravadas por el uso de la violencia y prolongación indebida de la detención en perjuicio de Pablo Damián Velázquez.

Hoy la noticia es otra, pues los uniformados fueron absueltos. El abogado Nicolás Vedia, jefe de la Dirección General de Asuntos Jurídicos de la Policía, comentó al respecto: “Pudimos demostrar que la policía actuó siguiendo el reglamento, que no hubo las lesiones que Velázquez menciona y que en todo momento hubo gente que vio lo que sucedía en el destacamento San Ignacio”, para luego rematar: “Hay razones científicas y reglamentarias que mostraron que los efectivos actuaron correctamente”.

Y luego realizó la transposición de la víctima en victimario, al asegurar que Velázquez “nunca contó todo; él tiene cuatro denuncias por violencia de género, una de su primera pareja, otra de la madre, de la hermana y finalmente la de la última pareja, que es cuando intervinieron los policías”.

En cuanto a las torturas que según denunció el hombre fueron recibidas en la comisaría, el abogado aseguró que no fueron posibles pues “En el edificio había movimiento: Daniela Velázquez (pareja que radicó la denuncia por violencia de género) se sintió mal y a las 21.40 llegó una ambulancia para atenderla; a las 21.50 la pareja de él terminó de radicar la denuncia; a las 22 se presentó una señora de apellido Sandoval a hacer una denuncia; a las 22.10 ingresa otra señora, Irma Méndez, que esperó hasta las 22.30 para que le tomen la declaración, hasta las 22.50. A esa hora lo llevaron a la Central de Policía. Esto muestra que ellas pudieron ver todo porque las puertas estaban abiertas”.

Para finalizar, el abogado de la policía remarcó: “En el juicio demostramos que los policías actuaron según el protocolo; el personal cumplió y hasta el último hizo lo que tenía que hacer”.