La Fundación Siwok de la iglesia anglicana denuncia que existe un pacto tácito entre comunidades indígenas y el estado salteño: los alumnos no estudian pero aprueban, los docentes cobran y los padres perciben asignaciones.

El presidente de la fundación Siwok, Alejandro Deane, visitó el 53G que conduce Martín Grande y criticó fuertemente las políticas del Estado salteño en la contención y ayuda que brindan a los pueblos originarios de Salta. el hombre es porteño pero desde hace 35 años trabaja en el Chaco Salteño con la fundación que es forma parte de la de la Iglesia Anglicana.

“Los funcionarios en Salta son burócratas, no tienen pasión” denunció Deane y aseguró que a esas personas les interesa más el otorgarles el DNI a estas personas para tener datos para llenar una planilla y llevarles a un superior, que el trabajar por mejoras en la vida de las comunidades.

En este sentido aseguró que lo que el Gobierno realiza con la entrega de planes y beneficios sociales son realmente erróneos a lo que la gente necesita, ya que con esto muchas veces pierden la cultura de trabajo que venían desarrollando por años y adquieren la mala costumbre de esperar todo de brazos cruzados. Deane tomó como ejemplo lo que ocurre en el ámbito de la educación de estas comunidades y tildó de lamentable la situación, ya que muchos chicos avanzan de grado sin siquiera saber leer o interpretar un texto básico.

Explicó que existe una intención dentro de todo el sistema de esconder los datos obtenidos en las diferentes pruebas de calidad que se realizan, cuando debería ser al revés, ya que al darlos a conocer motivarían a la sociedad en general en ayudar a estos sectores. El ingeniero contó como anécdota lo ocurrido con un grupo de 23 jóvenes que terminaron el secundario y viajaron a Córdoba para estudiar en un terciario aunque debieron regresar en su mayoría por no lograr responder a las exigencias que se les solicitaba. “Estaban acostumbrados a que en Salta no se los exigiera y se encontraron con otro sistema” manifestó.