Alfonso Prat Gay sostuvo que no estaban contempladas subas del gas de más del 1000%, siguiendo la línea de que el Gobierno experimenta sobre la marcha. Reconoció que desconoce el impacto de los aumentos sobre el consumo general.

El ministro de Hacienda y Finanzas, Alfonso Prat-Gay, reconoció ayer que el Gobierno cometió errores al estimar el alcance de los tarifazos. “Tal vez nos equivocamos en quiénes podían pagar la tarifa plena. Por eso, ahora estamos atendiendo y conteniendo a los que no pueden pagarlo”, fue la respuesta del funcionario en conferencia de prensa. Prat-Gay aseguró además que en la pauta de déficit presupuestario para este año estaba previsto un aumento de las tarifas energético no mayor a 400 por ciento. “No contemplábamos aumentos de más del 1000 por ciento”, agregó el ministro, quien afirmó que el Gobierno “se equivoca por hacer”. Además, revalidó la meta inflacionaria prevista para este año de hasta 25 por ciento, pese a que el acumulado de la primera mitad del año ya supera el 20 por ciento. Pero, tal como se hizo con el crecimiento económico que arribaría en el segundo semestre, el funcionario readecuó la fecha y prorrogó ese objetivo a marzo del año próximo. “Si no lo hacemos entre diciembre y diciembre, lo obtendremos entre marzo y marzo”, aseguró el titular de Hacienda sin más explicación.

El ministro ofreció una conferencia de prensa en Casa de Gobierno junto a la directora gerente del Banco Mundial (BM), Sri Mulyani Indrawati, por la aprobación de créditos del organismo por 845 millones (ver aparte). El tema de las tarifas, los amparos en distintas provincias, la inflación, el deficit fiscal y la caída económica acapararon las consultas.

El ministro aprovechó para reiterar los anuncios del día anterior. “Se anunciaron tres cosas. La primera y más importantes es que avanzaremos con un sistema de geo-zonificación para identificar potenciales beneficiarios de la tarifa social, que no estábamos pudiendo alcanzar”, afirmó. Según estimó, esto permitiría sumar 300 mil hogares y aumentar a 1,5 millones la cantidad de usuarios con acceso a gas de red que tendrán la oportunidad de sumarse a la tarifa social. “La segunda cuestión es que la modificación del cuadro tarifario necesariamente va a requerir una audiencia pública y hemos pedido fecha para realizarla. Y la tercera es el tope efectivo de 400 por ciento de aumento, no sobre la tarifa sino sobre la factura”, dijo el ministro.

“Hubiésemos preferido evitar el camino en materia de tarifas. Hemos tomado las decisiones que consideramos necesarias para las tarifas de agua, gas, luz y transporte”, sostuvo Prat-Gay, quien homogenizó el discurso de que se trata siempre del único camino posible. “No se podía resolver todo de un golpe, pero para el bolsillo de la gente fue un golpe fuerte”, afirmó el ministro, quien reconoció que se equivocaron en estimar el alcance del tarifazo. “Descubrimos que eran muchos más de lo que pensábamos los hogares que estaban afectados por un doble subsidio”, dijo Prat-Gay, quien sostuvo que ahora “no sabemos qué repercusión va a tener esto en el consumo”. “Por eso la insistencia de Macri para que se ahorre gas”, señaló en referencia las declaraciones del Presidente, quien había dicho anteayer que “si (las personas en sus hogares) están en remera o en patas” consumen más energía.

Descartó que la rebaja en el aumento del gas, que se limitó al 400 por ciento, impacte negativamente en el objetivo de reducción del déficit fiscal. “Lo que puedo decir en materia presupuestaria es que cuando anunciamos la meta de déficit fiscal 4,8 por ciento, no se tenía en cuenta un aumento de gas superior al 400 por ciento. No contemplábamos aumentos del orden del 1000 por ciento”, agregó. Respecto de la judicialización del tema en distintas provincias, afirmó que se hará una presentación ante el Juzgado de La Plata, cuyo fallo tuvo alcance nacional. “Volver al tarifario anterior, como se sostiene en el amparo, lo transforma en un sistema tremendamente regresivo, porque se le baja a los más ricos”, argumentó, sin referirse al universo general de los usuarios. “Este Gobierno se equivoca por hacer y no tiene problemas en corregir los errores”, agregó.

Prat-Gay sostuvo entonces que se mantiene la meta de déficit fiscal pero también de inflación. “Sí, recuerdo que dije un 25 por ciento para este año. La inflación ya está bajando”, aseguró. Sostuvo que los datos que relevan el Indec como de mediciones de la Ciudad de Buenos Aires, Córdoba y San Luis marcan una desaceleración en junio, aunque todavía están por arriba de los niveles previos a la devaluación de diciembre. “También los distintos analistas de todos los colores políticos, que relevan la inflación, estiman que para diciembre se alcanzará el 2 por ciento mensual y de 1,5 mensual hacia fines de año”, detalló. Con estas cifras, el funcionario se mostró esperanzado de llegar a la pauta de 17 por ciento el año próximo. Respecto del 25 por ciento estimado para este año, sostuvo sin ruborizarse que si no se llega en el período comprendido entre diciembre del año pasado y el de este año (año calendario), se obtendrá recién en marzo del año próximo. “Lo que tenemos que ver no es un año sino cuatro. Son 16 trimestres que llevará este proceso”, agregó.

También se refirió a la demorada reactivación económica. “Fuimos muy claros respecto de lo que iba a pasar este año. Todavía faltan seis meses para que termine el segundo semestre”, fue su respuesta. Sin dar nuevas fechas para el “despegue”, señaló que se mostró confiado en el esfuerzo de la obra pública, que “comenzó a reactivarse en mayo y junio”. También dijo que la “baja de la inflación” permitirá liberar recursos a la economía luego de las paritarias.

Fuente: Página 12