Contra el respaldo de los operadores de la patronal a una lista opositora, el combativo Mariano Cuenca fue reelegido por amplia mayoría al frente del  Sindicato de Obreros del Azúcar del Ingenio San Isidro. (Gonzalo Teruel)

Reformas laboral y previsional mediante, se avecinan tiempos difíciles para los trabajadores argentinos y en el Ingenio San Isidro lo saben. Por eso, el pasado martes se curaron salud y respaldaron a Mariano Cuenca como titular de la organización gremial que los representa.

La votación del Sindicato de Obreros del Azúcar del Ingenio San Isidro terminó con una tremenda victoria en las 4 mesas electorales ubicadas en la sede sindical y en el campo azucarero, 556 votos a 90, en favor de Cuenca de la “Lista Azul” y por sobre Juan López de la “Lista Verde”. “La cosa viene complicada y los trabajadores lo saben, por eso dieron un claro mensaje de unidad para enfrentar las políticas de ajuste del gobierno nacional y los recortes de la patronal” explicó el reelecto secretario general del SOEASI y lamentó haber vivido en las semanas previas a la votación una “campaña sucia”.

Según contaron a Cuarto Poder desde Campo Santo, esa campaña sucia fue sino planificada al menos avalada por la propia dirección de la empresa que apostó a la conformación de una lista opositora a Cuenca encabezada por López e integrada por personal jerárquico de la compañía. En entendible pedido de reserva de sus identidades, trabajadores del histórico ingenio sindicaron a la abogada Anabel Aparicio, hija y hermana de azucareros, como la operadora del Grupo Gloria, controlante de la compañía, en la interna del sindicato. “Manejó plata de la empresa para la campaña sucia y quiso comprar la voluntad de los azucareros” indicaron y porfiaron que “no pudo porque el trabajador azucarero es noble y es consciente de cómo estábamos y de cómo estamos ahora con un sindicato que nos defiende de verdad”.

En su campaña, Cuenca prometió pocas cosas: mejores condiciones de trabajo, un salario digno y defender la mano obra de posibles despidos. Sus compañeros de faena le creyeron porque una gestión combativa e inteligente lo avala. “El año pasado la empresa echó 60 compañeros y con la lucha sindical conseguimos que los reincorporen” explicó y recordó que no fue la primera vez que una lucha gremial tuerce el brazo de la empresa peruana controlante del mítico ingenio salteño fundado en 1760.

En Efecto, un informe del Observatorio del Derecho Social de la CTA Autónoma identificó a conducciones sindicales jóvenes y combativas, como la de Cuenca, como responsables de una inocultable mejora salarial para los trabajadores azucareros. “A lo largo de los últimos años los trabajadores azucareros de Jujuy y Salta han experimentado importantes transformaciones en cuanto a su organización y acción sindical (…) La consecuencia más visible de este proceso ha sido una recuperación significativa del salario y una mejora de las condiciones laborales, en gran medida como producto de la lucha de los trabajadores y las organizaciones sindicales” reveló el documento circulado a fines del año pasado y especificó que “el fortalecimiento sindical y el impulso de medidas de acción colectiva han generado mejores condiciones de vida para el conjunto de los trabajadores azucareros de Salta y de Jujuy”.

Esa “acción colectiva” que describió la CTA en su informe se materializó esta misma semana cuando a Campo Santo llegaron, entre otros dirigentes azucareros, Rafael Vargas y Ángel Ledesma de los gremios de los ingenios Río Grande y Ledesma para apoyar a la actual conducción de San Isidro.

Todos son conscientes que “se vienen tiempos difíciles para los trabajadores” y creen que la única forma de sostener “los derechos adquiridos” es a través de la organización sindical. “Las próximas paritarias van a ser duras, las empresas van a querer ir a la baja” adelantó Cuenca que, hasta que llegue esa discusión entre marzo y abril del año que viene, prometió “defender los puestos de trabajo”. Sus compañeros confían que así lo hará y esta semana revalidaron su representación gremial por los próximos 4 años.