Los intendentes de Guachipas y Embarcación, Néstor Parra y Freddy Llaya, se sumaron en las últimas semanas a la larga lista de funcionarios políticos involucrados en siniestros de tránsito. (Gonzalo Teruel)

En momentos en que el Congreso de la Nación se apresta a modificar la legislación vinculada con la siniestralidad vial, endureciendo las penas para aquellos que resulten responsables de accidentes de tránsito, dos encumbrados dirigentes políticos protagonizaron choques en rutas salteñas. Al fin y al cabo, los pueblos paran a sus gobiernos y gobernantes. Los muertos de la imprudencia y la negligencia al volante siguen agigantando la lista negra -suman al cierre de esta edición casi 90 en lo que va del año- y no hay motivos para que en ella no haya dirigentes políticos.

¿Los últimos?

Los últimos accidentes de tránsito con políticos involucrados fueron protagonizados por los intendentes de Embarcación y de Guachipas. Según se informó desde despachos policiales, Freddy Llaya circulaba en su automóvil particular, en horas de la noche, cuando en el centro de Embarcación embistió a una motocicleta en la que viajaban una pareja y una menor de edad. Descendió del auto y asistió a los motociclistas. Los llevó al hospital donde se comprobó que los tres presentaban lesiones leves.

Fue un episodio menor pero igualmente peligroso. De acuerdo a los testigos del hecho, Llaya hablaba por teléfono celular al momento chocar y eso agrava su responsabilidad. Está prohibido hablar por celular mientras se maneja. En este caso la situación es aún más compleja ya que el intendente padece una malformación congénita en una de sus manos. Freddy Llaya no es un discapacitado pero ¿reúne las condiciones para tener carnet de conducir y manejar un auto sin modificaciones acorde a su problemática? La normativa al respecto es ambigua.

Sólo unas semanas atrás, Néstor Parra protagonizó un accidente de tránsito en Villa María Ester en la capital salteña. Todavía debe determinarse quién fue el responsable pero lo cierto es que chocó su camioneta Toyota Hilux contra un Fiat Uno que trabajaba de remisse. Emanuel, chofer del auto de alquiler, aseguró a la prensa que “el intendente jamás se bajó a preguntarme como estaba yo, siendo que me quede con traumatismo de cuello”. “Él tuvo la culpa del choque porque venía a gran velocidad y zigzagueando cuando se produjo el accidente y después del choque paró a mitad de cuadra, se fijó en su camioneta y se fue”, agregó y sugirió que el jefe comunal estaba alcoholizado. Parra descartó tales acusaciones y denunció que después del choque fue amenazado y extorsionado telefónicamente por la dueña del auto “para sacarme plata”. No es el primer incidente vial de la familia Parra. Hace unos años, Sebastián, hermano del actual intendente, protagonizó otro accidente en la Ruta 6. Gobernaba Guachipas, Eduardo, padre de ambos.

2012, año trágico

El 2012 fue trágico en materia de seguridad -o inseguridad- vial. Murieron en calles y rutas salteñas 225 personas. El fatal número superó en 35 a los registros de 2011 y constituyó un nefasto récord. En junio, la política y el sindicalismo no pudieron escapar al luto. Con diferencia de horas, en sendos accidentes, murieron el diputado Carlos Porcelo y el titular de la ADP Virgilio Choque.

El legislador de Orán falleció como consecuencia de un choque en la Ruta Nacional 34 -cerca de Pampa Blanca- cuando regresaba a la provincia desde Jujuy. “Intentó esquivar a un motociclista, lo que produjo que el vehículo atrape la banquina dando varios vuelcos”, informó, en un escueto parte de prensa, la Legislatura. La muerte de sindicalista también se produjo en la Ruta 34 cuando su camioneta Toyota Hilux, conducida por Laurindo Morales, colisionó con una Citroen Berlingo. Murieron en el acto Choque y el chofer de la Citroen, Francisco Miguel Llopis. “Lamentablemente, Salta es una de las provincias donde la principal causa de muertes son los accidentes de tránsito”, dijo el vicegobernador Andrés Zottos al levantar la sesión del Senado.

Reconoció, además, que “el trabajo en seguridad vial no alcanza”. “Vamos a ser sinceros: hay una sola ruta de comunicación hacia el norte de la provincia y está en malas condiciones”, aseguró. Un año después, las vías de comunicación no han mejorado en Salta.

También Zottos

Estando al frente del Poder Ejecutivo por un viaje de Juan Urtubey, el vicegobernador y la entonces candidata a diputada Cristina Fiore protagonizaron en septiembre de 2011 un accidente al chocar con una motocicleta. Los testigos del hecho y los primeros periodistas que llegaron a la esquina de Balcarce y Arenales informaron que la camioneta Toyota SW4 era conducida por Zottos.

En pocos minutos llegaron al lugar el SAMEC y -por lo menos- una treintena de policías. “Rápidamente y mientras la pareja herida era trasladada al Hospital San Bernardo, agentes de la Dirección de Seguridad Urbana liberaron la camioneta y limpiaron la calle”, dijeron vecinos del lugar. Esa versión fue desestimada por la propia fuerza de seguridad. El comisario José Hinojosa, por entonces titular del Departamento de Prensa de la Policía, indicó que “se procedió como se hace habitualmente”. “Si quedan restos esparcidos sobre la calle, más si se trata de combustible o algún otro elemento que pueda generar otro accidente, la calzada tiene que ser limpiada y eso fue lo que se hizo”, señaló e identificó a Daniel Aparicio como “chofer del vicegobernador y quien estaba al volante al momento del accidente”.

Testigos del siniestro, ratificaron, por el contrario, que manejaba Zottos. “Poco después una tercera persona llegó en otro vehículo y, después de un breve diálogo con el vice, habló en privado con la policía y se hizo cargo del accidente”, dijeron. También arribó al lugar el entonces secretario de Seguridad, Aldo Rogelio Saravia, que despachó con premura a Zottos y Fiore en la camioneta en la que había llegado Aparicio.

Otro intendente

En octubre de 2010 el intendente de Campo Quijano, Manuel Cornejo, fue protagonista de un fatal accidente en la Ruta Nacional 51, a la altura del paraje conocido como Villa Lola. Cornejo arrolló con su vehículo a una mujer de 50 años que falleció a causa de los múltiples traumatismos provocados por el violento impacto. “Eusebia Ruiz, acababa de apearse de un ómnibus interurbano y se disponía a cruzar la calzada, cuando la camioneta Ford Ranger conducida por Cornejo la atropelló”, informó la prensa. El intendente se justificó diciendo que la víctima apreció de manera intempestiva -y por delante del colectivo- y no le dio tiempo de esquivarla. La familia de Ruiz asegura que la mujer intentó cruzar por detrás del ómnibus y que Cornejo debió verla aunque no atinó a reaccionar. La justicia debe expedirse al respecto.

Un quilombo

También en 2010, Gonzalo Quilodrán renunció a su puesto de secretario del Interior luego del fallecimiento de una persona que había atropellado días antes. En un comunicado de prensa, Quilodrán explicó que su renuncia obedecía a un complejo estado anímico y a su vinculación a una causa penal por la muerte de Néstor Milagro López.

Cerca del acceso al Barrio Casino, sobre la avenida Paraguay, el funcionario se llevó por delante la motocicleta de López quien iba acompañado por Ofelia Elena Rodríguez. Según dijo el propio Quilodrán “en la madrugada del 17 de agosto regresaba de los festejos patronales de Aguas Blancas y estaba al volante luego de dejar al chofer oficial en su vivienda de Barrio Intersindical”.

Los peritos que actuaron en la causa consideraron que el conductor de la camioneta “no fue el responsable de lo ocurrido”, ya que la motocicleta de la víctima había cruzado el semáforo en rojo. Quilodrán se sometió inmediatamente y de forma voluntaria al control de alcoholemia de rigor -que arrojó resultado negativo- aunque eso no quitó las sospechas sobre las condiciones del político.

No se salvan ni los U

Estando al frente del Fondo de Reparación Histórica, el hermano del gobernador, Rodolfo Urtubey, sufrió un accidente en las rutas salteñas. El mismo contó lo sucedido y reconoció que resultó sólo con una lesión leve en una mano. “Viajaba en una camioneta oficial y, debido al polvo en suspensión, el chofer no pudo ver que el camión que iba adelante había reducido la velocidad por un paso a nivel y chocamos”, dijo. “Afortunadamente llevaba puesto el cinturón de seguridad y funcionaron los airbags”, explicó el hoy precandidato a Senador y añadió que “el impacto no fue fatal porque circulábamos a 20 kilómetros por hora”. A corta distancia -delante del camión- en otro vehículo viajaba el gobernador que por la falta de señal de celular se enteró más tarde del accidente. Fue un episodio menor y el acto de campaña contó, pese a todo, con los hermanos Urtubey en el escenario.

El año pasado, un sábado de abril, Juan Manuel Urtubey sufrió un leve accidente en su moto. Imprudente, el mandatario paseaba con un grupo de amigos sobre la Ruta 47 que bordea el dique Cabra Corral. Según trascendió, Urtubey perdió el equilibrio de su moto BMW de alta cilindrada porque un animal se cruzó sobre la ruta. Se cayó pero solo sufrió heridas leves. “No pasó de un raspón en el brazo y no afectará mi agenda de hoy”, dijo sonriente el gobernador al iniciar sus actividades en la mañana del lunes.

Proyecto sobre ruedas

Diputados de la Nación debaten en comisiones un proyecto de ley, que ya cuenta con media sanción del Senado, para endurecer las penas hasta un máximo de 12 años de prisión a los conductores irresponsables y desaprensivos que provoquen la muerte de un tercero.

El salteño Raúl Córdoba, miembro de la Comisión de Familiares Contra la Impunidad, participó esta semana de las deliberaciones y contó a Cuarto Poder que “hay un proyecto de ley de delitos contra la seguridad vial y otras presentaciones relacionadas con el tema de la siniestralidad vial que pronto se van a tratar en el recinto de Diputados”.

“Seguramente se va a llegar a la aprobación pero todavía faltan acordar detalles en 3 puntos: velocidad máxima, alcohol y drogas, y fuga”, explicó Córdoba.