Se realizó en el marco de la marcha para exigir justicia por Lucía Peréz. Una intervención artística en el que los cuerpos inertes de cinco mujeres metidas en bolsas plásticas, como cadáveres, se vieron caer por las paredes de una edificación.

El mensaje era claro: la violencia machista continúa dejando a su paso cuerpos como el de Lucía y como el de ellas, cadáver tras cadáver, sin que la justicia se manifieste verdaderamente. El performance estuvo a cargo del colectivo artístico Expresión Mole, quienes utilizan acrobacias, técnicas circenses y danzas aéreas en sus obras de teatro y performances. Para ellos, era hora de llamar la atención una vez más acerca del hecho en que en Argentina se registra un femicidio cada 32 horas.

Según Carolina Yuriko Arakaki, una de las integrantes del colectivo, la intervención del espacio público nació como una manera de llamar la atención de los ciudadanos de a pie, y los que muchas veces no están inmersos en las protestas como ellos. “Esta es una masa de gente que no es del palo del arte y muchas veces se muestra indiferente ante los hechos de los que incluso da cuenta la prensa o no participa de las marchas”.