Scioli y Macri aceptaron debatir en televisión antes del 22 de noviembre, cuando por primera vez en la historia se definirá al presidente en segunda vuelta.

Metidos de lleno en la campaña de cara al ballottage, Daniel Scioli y Mauricio Macri acordaron ayer que participarán de un debate televisivo antes de la elección del próximo 22 de noviembre. Con el escrutinio provisorio cerrado en 36,86 por ciento para el FpV y 34,33 para Cambiemos, los dos postulantes recorrieron medios de comunicación durante buena parte del día y dieron sus respectivas conferencias de prensa en las que empezaron a mostrar sus estrategias para las próximas semanas. Tanto Scioli como Macri salieron a seducir a los votantes de cada uno de los candidatos que quedaron fuera de carrera, en especial el 21,3 por ciento que optó por Sergio Massa. “Hoy comienza una nueva elección en la que la discusión de fondo está de cara al futuro: si es un gobierno que tenga muy claro lo que tiene que defender, proteger y priorizar, o es la concentración o dejar librado al mercado, con políticas de endeudamiento que a los argentinos nos generaron una gran frustración”, advirtió el gobernador bonaerense. Macri, todavía entusiasmado por los resultados, machacó con el discurso del “cambio” y convocó a todos los que no votaron por el oficialismo: “Este conjunto de dirigentes va a representarlos”, afirmó el líder del PRO, acompañado por la gobernadora electa bonaerense María Eugenia Vidal. Desde el frente UNA, en cambio, evitaron adelantar sus movimientos y señalaron que este miércoles anunciarán públicamente su posición.

Mientras las distintas fuerzas políticas seguían analizando en detalle los resultados del domingo, los dos precandidatos presidenciales no se tomaron descanso y produjeron el primer hecho político de cara al tramo final del largo año electoral. Scioli tomó la iniciativa y recuperó la idea del debate, que había quedado trunco antes de la primera vuelta. “Ya le había hecho llegar a Macri antes de las elecciones de ayer el mensaje de que si existía la eventualidad (de un ballottage) me parecía importante de cara a la ciudadanía dar un debate”, explicó Scioli, que había evitado participar en la emisión anterior, realizada finalmente el 4 de octubre con los otros cinco aspirantes a la presidencia. “La gran final es por el futuro de los argentinos: las dos visiones, las dos historias y los futuros que pensamos Macri y yo”, insistió ayer el candidato del FpV, sentado al lado de su compañero de fórmula, Carlos Zannini.

Consciente de que para llegar a la Casa Rosada necesitará captar la mayor parte de los votos de otras fuerzas, Scioli no perdió la oportunidad para hablarles a los que optaron por otros candidatos. Interpeló a “los que votaron al espacio de Stolbizer buscando rol del Estado de la socialdemocracia”, a los peronistas que buscan “más federalismo” apoyando al “compañero” Adolfo Rodríguez Saá y a los del Frente Renovador, “con prioridades que compartimos, como la de los jubilados, Ganancias y la articulación de los tres poderes en la lucha contra el narcotráfico, para que juntos podamos integrar esta agenda de desarrollo social”. “El votante del Frente Renovador está mucho más lejos de Macri que de nosotros, los del socialismo y Rodríguez Saá también. El problema lo tiene Macri”, remarcó Scioli durante su conferencia de prensa, en la que dijo sentirse “más optimista que nunca”.

A pesar de que los resultados no cumplieron las expectativas del FpV, los dirigentes ganadores este domingo salieron a respaldar al mandatario bonaerense. Gobernadores como la catamarqueña Lucía Corpacci, el sanjuanino Sergio Uñac, la fueguina Roxana Bertone y el chaqueño Domingo Peppo se mostraron optimistas respecto del desempeño futuro del candidato oficialista, igual que los intendentes electos Gustavo Menéndez (Merlo), Leo Nardini (Malvinas Argentinas), Jorge Ferraresi (Avellaneda) o el senador santafesino Omar Perotti, entre otros. “Soy el más claro ejemplo de que esta situación se puede superar. Hemos derribado el mito de que si se gana en primera vuelta no se puede triunfar en la segunda. Hay un gran trabajo por hacer y tenemos que empezarlo”, arengó Bertone, que venció en segunda vuelta al intendente de Ushuaia, Federico Sciurano.

En el comando de campaña sciolista anoche no tenían definida aún la fecha ni los detalles del debate. De todas maneras, la ONG Argentina Debate, que organizó la experiencia anterior, lanzó por su cuenta la convocatoria a realizarlo una semana antes de la votación, el 15 de noviembre a las 21 horas en la Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires. “Convocamos a los dos candidatos y a sus equipos a reunirnos para definir la fecha y las reglas del debate, previo al primer ballottage de nuestra historia”, sostuvo Hernán Charosky, coordinador general de la ONG. A través de un comunicado informaron que, en caso de concretarse el acuerdo, el encuentro será transmitido por señal abierta para que todos los canales de televisión y radio puedan transmitirlo de manera gratuita.

“Bienvenido el debate, no hay ningún problema”, respondió el jefe de Gobierno porteño en una de las entrevistas que integraron su raid mediático de ayer. Desde el macrismo recordaron que el líder de Cambiemos ya había aceptado participar de la edición anterior y que ahora no le escaparían al desafío lanzado por Scioli.

El macrismo también puso su foco en los votantes massistas y el propio jefe de Gobierno porteño dijo que mantuvo un diálogo con Sergio Massa. “Hay vocación de dialogar. Hubo un mensaje ayer y lo valoramos. Quiero sentarme con todos los candidatos para consensuar políticas de Estado”, señaló el líder del PRO, pese a que los massistas aclaran que no hay ninguna conversación abierta sobre la segunda vuelta.

Desde la izquierda, el FIT ya adelantó que llamarán a votar en blanco en el ballottage. Su candidato, Nicolás Del Caño, quedó cuarto, con el 3,27 por ciento de los votos. Un poco más atrás se ubicó la líder de Progresistas, Margarita Stolbizer, con el 2,53 por ciento de los votos. La diputada anticipó que tomará posición más adelante, luego de analizar la derrota, aunque cada espacio tendrá libertad de acción de cara al ballottage. El puntano Adolfo Rodríguez Saá, último de los seis postulantes, había anticipado que propondrá un acuerdo programático para definir un eventual apoyo de cara a la segunda vuelta. Sacó el 1,67 por ciento.