Después que se conociera un intento de secuestro a una adolescente en Güemes, ocurrió otro en la capital salteña. Personal del 911 logró encontrarla en el monumento a Güemes, pero el hombre ya se había ido. Ni con las cámaras lograron identificarlo.

La semana pasada se conocía que personas que se movilizaban en una camioneta de color negro intentaron abordar a una menor de edad, que se encontraba acompañada de su amiga, a quienes las siguieron hasta su domicilio. Sus familiares  radicaron la denuncia en la UR 11 de Policía de Salta. La policía logró detener a una persona que conducía una camioneta negra, también se encontró un arma de fuego en el interior del vehículo.

Ahora se informó que una chica de 14 años fue secuestrada, el lunes a las 12.15, cuando había salido de su casa a comprar un jugo. Sus familiares al ver que no volvía salieron a buscarla y luego llamaron al 911. Los efectivos lograron ubicarla en el monumento a Guemes donde relató lo que pasó.

«Salí de mi casa a comprar un jugo Baggio y cuando volvía del almacén, mientras caminaba por la vereda, me agarró un hombre del brazo izquierdo y me dijo «vení y no digas nada, que sino va a ser peor». Y de ahí hicimos la cuadra de mi casa y la otra. Yo no hice nada porque sentía miedo, entonces me preguntó cuántos hermanos tenía, a que colegio iba y después, cerca de los semáforos frente a una concesionaria, hizo que cruce la avenida Bicententario sola y yo la crucé. Hice una cuadra y el volvió a aparecer. Me preguntó de que trabajaba mi papá, si tenía plata, cuantos años tenía yo, a que curso iba, en que colegio. Caminamos dos cuadras más por la avenida Uruguay y me dijo que siguiera hasta el monumento sin darme vuelta, pero yo después me di vuelta y ya no estaba, así que comencé a correr y había dos policías. Escuché que me estaban buscando», relató a El Tribuno la joven, muy nerviosa y asustada. En pocos minutos fue llevada en un patrullero a la comisaría 1. Se supo que el secuestrador sería robusto, de unos 40 años, tez morocha y hablaría con una tonada extranjera.

Sin embargo pese a las cámaras de videovigilancia, el 911 no logró identificar al vehículo ni al hombre «Es alguien que sabe muy bien el movimiento de las cámaras de seguridad de la zona porque en las imágenes, solo se ve a la menor, pero él no aparece. Estamos tratando de identificarlo», informaron fuentes policiales.