Urtubey aseguró que trabaja para que la situación del Ingenio San Isidro se lo menos traumática posible. Las familias afectadas serían más de mil.

La crisis provocada por el cierre del Ingenio San Isidro no se termina. Ayer, el gobernador Juan Manuel Urtubey aseguró que trabaja para acercar a las partes.

“Hoy hay un situación de intranquilidad en la zona, no sólo porque hay 730 trabajadores que se quedan sin sus puestos, sino porque hay cañeros independientes de Salta y Jujuy, por lo que hay mucha gente más involucrada”, dijo el gobernador, según informó FM Aries. “Estuve reunido con las partes tratando de acercarlas, por lo menos para que esto se haga lo menos traumático posible”, agregó.

En FM Profesional, el abogado del Sindicato de Obreros y Empleados del Azúcar San Isidro, Enrique Wandschneider, dijo que los 730 despedidos son un sector de los afectados. Explicó que hay otros trabajadores del transporte o independientes que desarrollan alguna actividad comercial en la zona, por lo que serían 1500 las familias afectadas.