El Instituto Provincial de Salud de Salta está hasta las manos. Colas, números interminables y una catarata de trámites esperan para ser realizados. Las consecuencias de dos semanas de feriados y asuetos, y de las vacaciones de varios.

Tras el clásico fin de año en el que no se hace más que comer y salir, retomar las actividades puede costar mucho. Es el caso de los que se encuentran en el Instituto Provincial de Salud de Salta (IPS).

Según informó Qué Pasa Salta, el IPS es uno de los lugares más concurridos por estas horas. Parte del personal está de vacaciones, lo que provoca que la atención se vea reducida (atienden cinco de diez cajas en la parte de autorizaciones) generando demoras. Comprar órdenes también es una tarea que requiere de paciencia, ya que sólo una de las cajas se encuentra abierta.

Otro de los problemas suscita en la no atención en otros puntos habilitados para estos trámites como la Central de Policía.