Tiene 30 años y es auxiliar de una fiscalía mendocina. Estaba en su auto con dos chicas de 12, a quienes había suministrado alcohol, marihuana y cocaína; fue detenido cuando abusaba de una de ellas. Una de las niñas tiene sífilis.

En Mendoza, dos niñas de 12 años que fueron abusadas por un hombre de 30 años, auxiliar de un fiscal, además fueron drogadas con una combinación de alcohol, marihuana y cocaína, informó la fiscalía a cargo de la investigación. Las chicas, una de las cuales además dio positivo en el análisis de sífilis, están siendo asistidas por el Órgano Administrativo Local (OAL), mientras que Lucas Fernández Serione, auxiliar de la fiscalía de Santa Rosa (un municipio al este de Mendoza), está imputado por “abuso sexual agravado por acceso carnal”. El hombre había sido detenido en cercanías del dique el Carrizal, a 50 kilómetros de la capital provincial, el jueves pasado, luego de que una pareja que pasaba por la zona alertara a la policía: al momento de la detención, Fernández Serione estaba abusando de una de las niñas en el asiento trasero, mientras que la otra se hallaba, también intoxicada, en el asiento del conductor.

Fuentes judiciales informaron ayer que, luego de que los estudios confirmaran que a las chicas les fueron suministradas drogas, la fiscalía provincial a cargo de la investigación pedirá la intervención de la Justicia Federal. Por otra parte, el fiscal de Cámara que lleva adelante el caso, Oscar Sívori, adelantó que se abrirá otra causa para investigar los abusos anteriores y el entorno en el que viven las niñas, luego de que los análisis confirmaran que una de ellas padece sífilis.

En un allanamiento realizado en la casa de Fernández Serione, los investigadores encontraron vasos, algunos con marcas de lápiz labial, y restos de marihuana, además un teléfono celular y un cd que habían sido arrojados a la basura y fueron rescatados para que los perite la División de Delitos Tecnológicos.

En la causa, los investigadores también están en busca de datos que permitan identificar a un hombre presuntamente llamado Matías, que habría acompañado esa noche al imputado Fernández Serione y se habría bajado del auto antes de llegar al Carrizal, aunque sí habría estado presente cuando las niñas subieron al vehículo.

Luego de ser detenido, Fernández Serione había asegurado que creía que las niñas eran mayores de edad. Sin embargo, el fiscal Sívori rechazó de plano esa excusa: “Las dos tienen cuerpo de nena. Una niña usa talle 10 y la otra talle 12; no tienen senos. Para mí no hay forma de que una persona pueda equivocarse respecto a su edad”, advirtió.

Las dos chicas “estaban extremadamente alcoholizadas, una casi a niveles de coma”, contó el fiscal  poco después de la detención de Fernández Serione. Por eso, esa noche a ambas niñas les debieron hacer lavajes de estómago en el hospital Perrupato.