Se están tirando con de todo entre assennatistas y posadistas.
Lo que empezó como una rama de radicales u, ahora tiene nuevas subdivisiones. assennatistas y posadistas se están tirando con de todo. Dicho así, parecería que hay dos legiones que se enfrentan, aunque la verdad es que es todo muy triste: no son más que dos gatos locos por bando.
El primer problema es que Matías Posadas, por siempre Urtufriendly e incluso Urtufan, ahora decidió acercarse a Gustavo Sáenz. Del otro lado quedó Matías Assennato. Y todo se vuelve más tenso porque mañana a las 15 el Frente Plural hará una asamblea donde se definirá la estrategia electoral y la eventual concertación de alianzas para las próximas elecciones.
Y ahí hay que ver qué pasa con el partido: si pasa a ser parte de un eventual frente que impulse a Sáenz como gobernador o si se queda con el urtubeycismo.
En este marco surgieron denuncias contra Assennato. En esas denuncias se asegura que Assennato los aprieta o amenza por WhatsApp para que expresen su apoyo al Urtuproyecto. El mensaje que circula dice algo así como que o expresan su apoyo a Urtubey o presentaran su renuncia.
Al parecer, según los denunciantes, Assennato les tiró esa frase por escrito.
Ahora los pluralistas posadistas quieren sancionar a Assennato (si es que amenazó por escrito, dejando tantas pruebas, merece ser sancionado no tanto por amenazar sino por ostentar tan poco inteligencia).
