Rompiendo una costumbre, Cuarto Poder se detendrá en un actor político no salteño. Es para transcribir algunas de las técnicas pedagógicas que propone el candidato a gobernador del PRO en Santa Fe, Miguel del Sel, a quien Mauricio Macri lo califica como un exponente de la nueva política.

Del Sel se refirió a las técnicas pedagógicas y la relación entre padres e hijos en el programa local “La mesa del café”. Como un buen alumno del sojero salteño Alfredo Olmedo, el candidato a gobernador de la provincia de Santa Fe y ganador de las PASO en esa provincia cuestionó que se la haya quitado “poder al profesor. Antes el papá era cómplice del maestro. Ahora el padre es cómplice del hijo que se porta mal. No hay respeto. Hay todo un problema que hay que solucionar”.

Después del diagnóstico, el ex humorista explicó cuáles serían sus soluciones. “Donde el pibe se porta mal, amonestaciones. Y, si no, rajarlo del colegio y que pierda el año y que tenga que volver la normalidad para ordenar esto que yo digo que es una rueda que se ha desencajado en la Argentina”, señaló.

También hablo de la relación entre padres e hijo: “Mi viejo me metió unos cintazos espectaculares y yo salí buen tipo”. También recordó que en la escuela “me metieron dos varillazos en las patas y terminé abanderado”. Del Sel  aclaró que se refería a lo ocurrido en el Colegio San Cayetano de su provincia y que la persona que le dio los varillazos era un cura de apellido Gatti. Después preciso que ante métodos como estos algunos “Te dicen: ‘Es chico’. Ma’ qué chico, metele un buen cocazo y no jode más”, planteó.

“¿Por qué los padres hoy son tan permisivos? –se preguntó Del Sel–. Viene un pibe y por ahí le pega o lo escupe al padre. Y los padres te dicen: ‘Bueno, es chico’. Ma’ qué chico, metele un buen cocazo y no jode más”, propuso como solución a los problemas pedagógicos.