La caída del consumo, la devaluación y la inflación de los últimos meses vienen golpeando duro a un sector que acumula despidos, cierre de locales y paritarias a la baja.

En los últimos seis meses el comercio en Salta registró alrededor de 400 despidos. La situación se entrelaza con la realidad económica nacional: menos poder adquisitivo para los trabajadores, es igual a menos consumo y, por lo tanto, menos trabajo. La devaluación del último trimestre, cercana al 40%, sumada a la inflación acumulada -estimada en 16% para el primer semestre- fueron lapidarias para los trabajadores del sector.

El secretario gremial del sindicato de empleados de comercio, Ángel Ortiz, se refirió a la situación: “El comercio chico es el más afectado, porque no puede aguantar los alquileres del centro y se retira de la zona de afluencia. Entonces sus posibilidades son menores, cierran sus puertas o despiden al poco personal que tienen. Los negocios que tienen 2 o 3 empleados, se terminan quedando con uno o directamente atiende el dueño”.

En los últimos meses cerraron sus puertas alrededor de 300 comercios, según indica el gremialista. En la mayoría de los casos se llevaron adelante retiros voluntarios o, directamente, despidos. En cuanto a las ventas, los rubros más perjudicados fueron los de indumentaria y los supermercados, donde se registraron caídas de entre un 5% y un 8%.

Respecto del reciente cierre de paritarias en un 25% -que anteriormente se había fijado en un 15%- el sindicalista señaló que: “No es suficiente, pero era lo máximo que podíamos acordar para que sea homologado. Para nosotros es algo muy necesario. No es lo óptimo, pero en un esquema de crisis es válido, por eso se firmó. Con esto logramos recuperar parte del daño del daño ya causado”.