El ex gobernador de Santiago del Estero, Gerardo Zamora, esposo de la actual mandataria, se mostró con Sergio Massa. Confirmó que los legisladores de su provincia van a aportar el quórum a Macri, quien visitará esa provincia.

Poco original, pero efectivo. Gerardo Zamora, vicepresidente del Senado y jefe político de Santiago del Estero, recurrió a una foto «casual» para confirmar su alejamiento del kirchnerismo. Después de dejar trascender en los últimos días que los diputados que le responden aportarán el quórum en la Cámara baja, el ex gobernador se mostró anteanoche con Sergio Massa, el dirigente opositor de mejor diálogo con el gobierno nacional y más lejano a Cristina Kirchner.

El encuentro entre Massa y Zamora se produjo durante los festejos por la 25a edición de la Fiesta de la Salamanca, en el Club Atlético Sarmiento. Es una celebración tradicional que se hace en la ciudad de La Banda, la segunda con mayor población de la provincia. Fueron parte de la charla, de unos pocos minutos, las esposas de los dos dirigentes, la actual gobernadora de Santiago del Estero, Claudia Ledesma, y Malena Massa, y el intendente de La Banda, el massista Pablo Mirolo.

«Esta celebración nos reúne y viene a ratificar lo que digo siempre, somos adversarios en lo político, pero nos podemos reunir en una fiesta para la gente», dijo Massa, en diálogo con la prensa. Zamora no se refirió al encuentro. Sus allegados ratificaron que el Frente Cívico va a dar quórum en ambas cámaras y argumentaron que siempre había mantenido su autonomía respecto del kirchnerismo. «Votamos cada una de las leyes, pero nunca fuimos parte del Frente para la Victoria (FPV)», suele recordar Zamora.

La postal se conoció días después de la ruptura del bloque de diputados del Frente para la Victoria (FPV), encabezada por el ex titular de la Anses Diego Bossio y por los legisladores que responden al gobernador de Salta, Juan Manuel Urtubey, también de muy estrecha relación con el líder del Frente Renovador.

Con el alejamiento de los seis diputados del Frente Cívico por Santiago, el kirchnerismo -que pasó de tener una bancada de 95 integrantes a una de 81- pierde además su principal aliado en la Cámara baja.

Estación intermedia

La foto con Massa es para Zamora una estación intermedia en su retrato con Macri. El jueves pasado, el ministro del Interior, Rogelio Frigerio, visitó la provincia y anticipó que el Presidente prevé visitar Santiago del Estero en los próximos meses.

El funcionario de la Casa Rosada mantuvo un encuentro con Zamora y con la gobernadora Ledesma. «Definimos la posibilidad de una visita de todo el gabinete nacional a Santiago del Estero en los próximos meses, en la que podremos trabajar y resolver con mucha mayor rapidez, con más celeridad, todas las cuestiones pendientes que hay entre Nación y provincia», dijo entonces Frigerio.

El ministro estuvo acompañado por el ministro de Educación, Esteban Bullrich; el presidente de la Cámara de Diputados, Emilio Monzó, y el viceministro del Interior, Sebastián García de Luca.

Con el aporte de Zamora, el oficialismo quedó en mejores condiciones para alcanzar el quórum en Diputados, de 129. A los 90 legisladores propios, les sumará los 17 del Bloque Justicialista y otros 8 del peronismo disidente, por lo que le bastaría con el respaldo de sólo un sector del frente UNA, de Massa y José Manuel de la Sota.

Con un bloque de tres miembros, también será importante el aporte que el Frente Cívico le haga al Gobierno en el Senado, aunque en la Cámara alta sigue siendo imprescindible para el quórum el respaldo de un sector del PJ.

El viraje de Zamora, de origen radical, sorprendió al kirchnerismo, que tiene en Santiago del Estero a la provincia en la que sacó mayor porcentaje en las últimas elecciones. Cristina Kirchner había nombrado al ex gobernador en la presidencia provisional del Senado y, tras la derrota de Daniel Scioli, lo impulsó para la vicepresidencia de la Cámara alta.

El caudillo de Santiago de Estero ya había dado, de todas formas, indicios del despegue. Sólo la mitad de sus diputados asistieron a la última sesión del año pasado. Además, a contramano del kirchnerismo puro, él y sus legisladores estuvieron el 10 de diciembre en la ceremonia de jura de Macri, en el Congreso.

Fuente: La Nación