Alejandra Gauffin, una de las ternadas en el polémico concurso para integrar la Cámara de Apelaciones en lo Civil y Comercial, renunció a su postulación.

A través de un escrito en el que aseguró se puso en tela de juicio su “honestidad e integridad moral”, María Alejandra Gauffin, una de las ternadas para cubrir las 5 Salas de la Cámara de Apelaciones en lo Civil y Comercial, presentó su renuncia.

“Mi decisión responde a los acontecimientos de público conocimiento en los que fuimos involucrados dos postulantes poniéndose en tela de juicio nuestra honestidad e integridad moral”  escribió Gauffin luego del público enfrentamiento entre el gobernador Juan Manuel Urtubey y el Consejo de la Magistratura por el proceso de selección de camaristas.

“Hace casi veinte años que presto servicios en el Poder Judicial, sin mácula alguna en mi legajo, accediendo a cargos a lo largo de mi carrera, mediante concurso, lo que denota mi serio compromiso con el servicio público de la justicia” se defendió Gauffin y confirmó su deseo de “dar un paso al costado para preservar la paz de mi familia y de la comunidad en su conjunto”.

Desde hace largas semanas un insidioso rumor indicaba que dos de las participantes del concurso, Gauffin y María Victoria Mosmann, secretarias de la Cámara Civil, conocían de antemano el contenido del examen y, por eso, obtuvieron de los puntajes más altos.

Previo a la elección de los nuevos jueces, el gobernador Urtubey requirió la opinión de la Fiscalía de Estado a cargo de Mónica Lionetto, devolvió las ternas y reclamó un nuevo concurso que, por ahora, el Consejo de la Magistratura rechazó.