Desbarataron una banda de secuestradores de mascotas en Salta. El Modus Operandi: fichaban a sus víctimas en las redes sociales para luego dar el golpe.

Entre los usuarios de Facebook, sobre todo, hay algo que se ha convertido en una moda peligrosa: sacarse fotos bobas con sus mascotas. Este hecho ha devenido en la avivada de unos cuántos que aprovechando las circunstancias y la pelotudez de los dueños han  decidido comenzar a delinquir. Hablamos en particular de la famosa “Banda Gatera”, un conjunto de malvivientes dedicado a los secuestros extorsivos de mascotas en distintos barrios salteños. Hasta el momento se han reportado sólo casos en los que las víctimas directas son felinos, y no tanto así caninos, aunque no se descarta que algunos ya estén pensando en afanarse uno que otro pichicho.

Edgardo “Ojodesable” González y su cómplice, Manuel “Caraicuchi” Reynoso son, por ahora, los dos únicos implicados en la ola de secuestros. “Estos malvivientes fichaban a sus secuestrados a través de las redes sociales, de donde obtenían datos tales como la vivienda y el tenor cariñoso de los dueños y dueñas de los gatos afanados para luego pedir el rescato, algunas veces enviando un pedazo de oreja o algunos bigotes en sobre para demostrar que hablaban en serio”, comentó a El Polichombi el oficial Saravia, encargado de la investigación. “Logramos dar con los malhechores luego de un arduo trabajo, tuvimos que subir varias fotos junto a gatos seleccionados en la fuerza, mucho duckface y hashtag involucrado”, aseguró orgulloso el uniformado.

Una vez allanado el lugar de los secuestradores se dieron con una cantidad de animales importante, siete para ser más exactos, hacinados y en total descuido. Luego los mininos fueron devueltos a sus dueños, salvo uno que se tomó el palo porque, aseguran los expertos, estaba harto de aparecer en fotos de mierda que no le favorecían y prefería la libertad de los techos a volver con la pelotuda de la dueña que hasta le había creado un perfil falso.