La Sociedad Rural de Salta guardó silencio con respecto al escándalo en la entidad nacional por la reelección de Miguel Etchevehere sobre quien pesa denuncias por reducción a la servidumbre, cargos por demás comunes en provincias como la nuestra.

La postura del 99,9% de Sociedad Rural salteña parece ser hacerse los distraídos con respecto a las internas que ocurren en la entidad nacional, luego de que delegados y directores renunciaran a la Comisión Directiva una vez conocida la re-reelección de Luis Miguel Etchevehere al frente de la oligárquica entidad. El riguroso silencio de los salteños puede deberse a que las acusaciones que pesan sobre Etchevehere tienen que ver con una práctica bastante común en Salta: explotación de peones y hasta trabajo esclavo en unidades agropecuarias.

Al silencio salteño, se contraponen la estridentes renuncias que ocurren a nivel nacional y que, como era de esperarse, el medio nacional que mayor cobertura realizó fue Página 12. Y es que luego de ser reelegido como presidente de la Sociedad Rural Argentina (SRA) por el periodo 2014-2016, Etchevehere empezó a sufrir renuncias al cargo. La más dura de las renuncias fue la del delegado y ex director de la SRA Miguel Thibaud “En el marco del Comité Unidad y Acción del cual formo parte, tuve oportunidad de opinar y votar en desacuerdo con su reelección como presidente (…) Por tal motivo y siendo coherente entre mis acciones y mi forma de pensar es que no puedo éticamente, como delegado zonal, continuar representando a la Comisión Directiva mientras usted ocupe el cargo de presidente”, expreso en su carta de renuncia. En su última reunión, el ahora ex delegado cuestionó la legitimidad de Etchevehere para ocupar la titularidad de la entidad por las distintas denuncias penales en su contra, una por defraudación y otra que lo involucra en posible reducción a la servidumbre de dos peones de la estancia La Hoyita, propiedad de la empresa del Grupo Etchevehere, Las Margaritas SA. “Me preocupa que como socio o delegado de la SRA nos involucren a todos como explotadores de empleados o como esclavizadores”, sostuvo Thibaud.

La lista de renuncias continuará con Juan Monín, director de la zona noroeste (Catamarca, La Rioja, Tucumán y Santiago del Estero), Soledad Diez de Tejada, delegada de Venado Tuerto, y Lorena del Río, delegada de San Miguel del Monte, entre otros. El año pasado, Etchevehere echó al delegado de La Pampa, Marcelo Braga. El director de esa provincia, Luis Amitrano, también renunció. El club de los ex presidentes de la SRA, integrado por Horacio Gutiérrez, Guillermo Alchouron, Eduardo A.C. de Zavalía, Enrique Croto, Luciano Miguens y Biolcati, decidió respaldar otro mandato de Etchevehere a pesar de las denuncias penales en su contra y de los cuestionamientos públicos de varios de los integrantes de la misma entidad. Cuando fueron publicados los detalles de la denuncia, Etchevehere ensayó varias respuestas hacia el interior de la entidad, que luego replicó en los medios de comunicación hegemónicos: “Que todo era una operación del Gobierno”. Mientras todo eso ocurría.