Las puesteras denuncian malos tratos y hostigamiento por parte de un abogado, a quien acusan de querer monopolizar la venta. “Quiere comprar todos los locales mediante amenazas y golpes”, expresó una de las denunciantes.

Puesteras del conocido y tradicional Patio de la Empanada, ubicado en San Martín y Esteco, denuncian al abogado Walter Escobar por supuestas amenazas y malos tratos. Aseguran que el letrado quiere monopolizar el lugar comprando los diversos puestos.

“Estamos acá desde que se inauguró, es nuestro medio de vida y ahora nos lo quieren sacar, yo no puedo trabajar porque estoy discapacitada, yo no quiero perder el puesto porque de qué vamos a vivir”, expresó Blanca Mercado, que trabaja junto a sus hijas en el puesto 6 del Patio.

Mercado explicó en Radio Salta que en el año 2011 Escobar compró un puesto de manera ilegal, ya que es un predio municipal. Posteriormente se apoderó de otros dos locales, los cuales explota comercialmente. “Él quiere comprar todos los locales mediante amenazas y golpes. Nos ofreció plata, aprovechándose de la discapacidad de mi madre, nos ofreció llevarla a los mejores sanatorios a cambio de que nosotras le vendamos el local, pero está prohibido porque es algo municipal. Como nos negamos a vender el local, lo que él hace es generar presión, nos cierra con cortinas y con candados las puertas principales, les pone un candado y el solamente maneja las llaves, le pone candado a los baños”, contó una de las hijas de Blanca, Alejandra Saravia, quienes ahora se hacer cargo del local por la discapacidad de su madre.

“Todo está denunciado y judicializado en la Fiscalía Penal N 8 a cargo de la doctora Buabse, ella nos brindó protección con una consigna policial, la cual se niega a ir por temor porque Escobar los amenaza diciendo que es familiar de altos funcionarios y los va a hacer trasladar a lugares inhóspitos. Como el abogado no tiene los papeles habilitantes, procedieron a una clausura preventiva que no fue respetada. En menos de seis días le levantaron la clausura, es algo indignante. Cuando pedimos las explicaciones correspondientes fuimos al Tribunal de Faltas, donde hablamos con el doctor Núñez, pero allí también nos maltrataron y nos negaron soluciones”, completó Saravia.