El domingo pasado estuvimos en el Roots 90’s Fest, un festival cuya consigna era “¿Querés volver a los 90?”, entonces nos metimos en la máquina del tiempo o algo parecido y terminamos escuchando a tres bandas locales y una tucumana hacer un homenaje bastante particular a esta década añorada por algunos y puteada por otros. (Rodrigo España)
Los noventa se fueron hace un tiempo, sin embargo y por alguna extraña razón, todavía muchos se empecinan en tratar de recordarlos como una época gloriosa, dorada o tal vez mítica; no únicamente en la música. La sola mención de un nombre, cual magdalena proustiana, puede generar un retorno directo a los sabores, olores y sonidos de aquella década: MeneM, un capicúa que no significó mucha buena suerte.
Además del apogeo neoliberal, hay algo que nos hermana a quienes percibimos esta época como una situación auditiva inaugural: todos sufrimos la deficiente educación musical generada por la intrusión de MTV en nuestros oídos.
Luego de pasada la primera década del nuevo siglo (y un tanto (no mucho) alejados ya de la muchachada neoliberal) todavía están presentes algunas prácticas que se empeñan en retornar a ese lugar. La música, a veces por desgracia, es una de ellas. Esto no implica que todo lo producido entre esos años sea nefasto, existieron picos altos de creatividad, aunque generalmente alejados de los medios masivos de difusión, entonces justo cuando parecía que todo eso podía revertirse y las personas al fin podrían compartir sonidos de manera directa entre escuchas/usuarios de música por internet, el revés de Napster nos mostró lo que en realidad hasta ahora es una constante: la música es también mercado y el mercado determina nuestros gustos.
A los bifes
Para el domingo a la tarde/noche estaba planeado el Roots 90’s Fest, algo así como “festival raíces de los 90”, y serían 4 las bandas encargadas de hacer el homenaje a las músicas de aquella época. En parte lo hicieron, en parte no.
Sisyphus, Madre T-Rezo, Golpe de Alas (Tucumán) y Clownface además de tocar composiciones propias hicieron covers de otras bandas que si bien pertenecen cronológicamente a los 90, tienen un sonido un poco más representativo del nuevo siglo: el Nü Metal. Korn y Slipknot fueron las bandas que acapararon las versiones elegidas, también ANIMAL.
El inicio estaba pactado para las 18, la música arrancó cerca de las 20 horas. La primera banda fue Sisyphus. Thrash y metal cuando todavía el grueso de la gente no había llegado o los que habían llegado esperaban en la puerta alguna señal que les indicara el momento preciso para entrar o hacían hora hasta que se acabara la birra comprada en el quisco.
Era una jornada de rock ATP (apta para todo público), adentro había niños que para festejar su día fueron llevados a escuchar un poco de metal. Un pequeño problema en la puerta: el patovica te confiscaba la gaseosa.
Una vez terminada la primera presentación, no sin algunos inconvenientes en el sonido, y mientras la segunda banda de la noche armaba lo suyo en el escenario, pintó un poco de break dance y al tronar de los parlantes los bailarines se deslizaban por la pista de baile que luego derivaría en zona de pogo. “Por las dudas somos bailarines de hiphop”, anunciaba uno de los changos luego de que realizaran una presentación improvisada que no les dio tiempo para que alguien agarrara un micrófono y tirara unas rimas.
Luego Madre T-Rezo estaban en el escenario, los problemas con el sonido continuaban y al segundo tema el vocalista tenía que pilotearla para que la cosa no acople. Pegado al medio del escenario mientras terminaba de cantar y al final el problema era también del retorno. El sonidista no la estaba pasando bien, menos los de la banda, el público estaba entre un me meto al pogo o no me meto al pogo. Algunos se acercaban tímidamente al centro, otros cabeceaban en la orilla. Todo se definió con el cover de Korn. Ante los primeros compases de “It’s on” se pasó de un semipogo moderado de 4 compadres al desmadre generalizado. Parecía que comenzaba la fiesta y el descontrol, pero cuando paró la canción los pogueadores también lo hicieron, de vuelta a los temas propios y de vuelta al headbang orillero.
Un nuevo cover, esta vez de ANIMAL, hizo que las ganas de saltar, chocarse, golpear y caer renacieran en los pogueadores que de manera intermitente fueron y vinieron toda la noche, casualmente se iban cuando las bandas no hacían covers, salvo dos o tres changos ansiosos de pogo, el resto era selectivo y parecía guardar la energía para los temas “pulentas”. Como invitado el Shaman subió al escenario y al final fueron cerca de 45 minutos de los Madre.
Mientras se preparaba la tercera banda de la noche eran muchos más los que se acomodaban en los distintos lugares disponibles en la Fábrica de Música. Videos de Tool, Marilyn Manson, Korn, etc. Giraban en la pantalla gigante y los niños jugaban al lado del escenario.
Nü (NOA) Metal
Los tucumanos de Golpe de Alas son una banda nueva, tan nueva que hasta se hace difícil seguirles el rastro, no hay videos ni grabaciones previas, a diferencia de las bandas salteñas que ya tienen (en el caso de Sisyphus y Clownface) discos en línea para ser descargados, y varios videos subidos.
A las 22 subían los tucumanos al escenario, changos jóvenes, un batero con toda la pinta de músico de Nü Metal, hasta se lo podía confundir con uno de los de Korn, salvo porque le faltaban las zapatillas. La banda se completaba con un guitarrista (voz), bajista y un dj que tiraba sonidos con la PC. La música, muy cercana a la fusión de metal y hiphop, con algunos toques de doom y el scratching que por las deficiencias del sonido no se podía apreciar demasiado. Con la voz pasaba lo mismo, tal vez si uno prestaba demasiada atención podía escuchar que, por ejemplo, en el tema “Tu voz” la letra decía: “Mi corazón latiendo está por vos”.
El público estaba impaciente y quería poguear con los hits, pero no de la banda. “Sacate la mierda, Sacate la mierda”, gritaba uno del fondo que se alegraba ante el amague de las primeras notas de la canción de Carajo. No tocaron “Sacate la mierda”.
Para la 4 canción el vocalista comienza a agitar al público: “Vamoasé pogo mierda” y el público responde: 5 changos (los que toda la noche no le fallaron al pogo) se mandan de cabeza al centro y de vuelta se larga el pogo moderado pero necesario en estas ocasiones. Todo se soluciona cuando otro cover de ANIMAL suena en el aire.
Antes de que se cumpla la hora los tucumanos dejaban el escenario y comenzaba el sorteo de los “kits” noventeros, que incluían un poster, una pulsera, algún disco y no sabemos si un patacón. El útlimo ganador fue el número 129, así que por lo menos esa era la cantidad de personas en el recinto, tal vez había un poco más de gente.
A las 23 horas subían los organizadores de la jornada, Clownface, banda que además de las tradicionales guitarra, bajo y batería, también contaba con un vocalista/dj. El sonido continuaba por la misma senda, muy pegado al metal. Y también sucedía lo mismo que con las otras bandas: el público quería escuchar covers, y esto se pudo notar cuando “People = Shit”, cover de Slipknot convocaba al mayor pogo de la noche, entre los muchachos que se habían reventado con las otras bandas previas también se sumaban algunas chicas que metían codazos y patadas al unísono. Uno que otro agarraba el micrófono para cantar junto con el vocalista. Alguien se sube al escenario y busca la complicidad de los de abajo para tirarse a sus brazos. No daba. Entonces se baja y sigue pogueando con el resto.
La noche de los 90’s se terminaba y una cosa quedaba en claro, todavía el Nü Metal pega en los oídos de la gente, las 4 bandas lo confirmaban. También otra cosa quedaba en claro, al público local parece interesarle más escuchar covers y recordar una época que apreciar lo que las bandas tengan para mostrar, por más que el sonido sea similar. El cover vende, y si algo nos quedó de los 90 es esa ley del mercado.
Fotos: Ela Nunes
