Un joven denunció que una secretaria del titular del Instituto Provincial de la Vivienda estafaba a la gente y pedía dinero para la adjudicación de casas.
Esta es una investigación presentada en el Murishow (Am 840): Una mujer denunció que hace un tiempo –noviembre pasada, en un remís para ser más precisos- conoció a un supuesto gestor del IPV. Este hombre le comentó que era puntero político, que tenía muchos contactos en el IPV y que podía ayudarla si necesitaba una casa o terreno. Entonces le da una tarjeta con su numero telefónico, la cita en su casa, en Juramento al 1300, allí le dice, porque en marzo ya se reunieron, le dice que necesitaba una vivienda. Él aclara que para iniciar el expediente tenía que conversar con una mujer, una tal Noelia. Todo esto está en la denuncia: que le pidieron 300 pesos, los cuales la mujer entregó en abril. En mayo le vuelve a pedir 400 pesos, para ir depositando e ir asegurando la vivienda. Le muestra, dice esta jovencita, un número de expediente y una nota dirigida donde supuestamente iba a tener posibilidades para el sorteo en barrio El Huaico. Además, ya en ese mes, en mayo, le dijo el denunciado que vaya reuniendo 20 mil pesos, porque iba a ser lo que iba a necesitar para asegurar la casa. Entonces, en mayo sacó un préstamo en un banco por 9.800; semanas después sacó otro préstamo en otro banco, por 10 mil pesos. Ya avanzando en el tiempo pidió otra suma 500 pesos para en este caso la gestora, para la mujer que estaba haciendo los favores y que en junio ya hizo entrega de los 20 mil pesos. Pero ahí no le dio ningún recibo; dijo que se lo iba a entregar después (hasta el momento de la denuncia nunca consiguió que le diera el recibió). Pero le dijo que se quedara tranquila, que el 10 de septiembre. El 11 de septiembre la mujer lo llamó porque no había salido beneficiada en ningún sorteo y entonces él le dijo que estaba a full con la campaña, que no podía atenderla, no podía darle ninguna respuesta pero que se quede tranquila que el trámite estaba.

Ella comenzó a averiguar: no había ninguna carpeta por supuesto.

En la denuncia aclara que por lo que pudo averiguar fue hasta el IPV y Noelia en cuestión es la secretaria del presidente del IPV, el licenciado Fernando Alesanco. Le preguntó a Noelia, dijo que en ningún momento conocía a este gestor que se ofrecía como tal. Ahí lo llamó y el hombre simplemente le envió un mensaje de texto y reconoció que le debía 400 pesos.