Un caso de posesión diabólica en el ejército hondureño derivó en una balacera que apenas la pudo parar el sacerdote contratado para exorcizar el regimiento.

Hace unas dos semanas la noticia que se descartaba por amarillista decía que “alumnos del Centro de Adiestramiento Militar Especializado han manifestado actitudes que denotarían la presencia demoníaca en sus cuerpos”.

Consultado por la prensa hondureña, el General Evaristo Chamico Deargelos comunicó que “se han presentado unos casos, a los cuales se les está dando un tratamiento médico, psicológico, como también se está reforzando la parte espiritual”.

Al parecer ni los tratamientos psicológicos ni la guía espiritual han dado resultado puesto que se informó de un incidente que implicó a uno de los jóvenes poseídos que en nombre del señor de las tinieblas intentó acribillar a balazos a sus instructores, luego fue reducido gracias a la intervención de un cura que le aplicó la bendición de dos tiros en la pierna derecha antes de que el suceso pasara a mayores.

“Es el caso más grave, por eso se le está dando un tratamiento especial y fue evacuado a un hospital”, aseguró nuestra corresponsal hondureña Kerelyne Campigotti Webster.

“Familiares de los soldados afectados han montado guardia en las proximidades del destacamento militar ubicado en la comunidad del Espinal, cercana a Juticalpa, último escenario de otra batalla entre el bien y el mal”, asegura la prensa de aquel país.