Shell comercializa la nafta premium a 21,57 pesos en Buenos Aires y a 24,40 pesos en Corrientes, un 13,1 por ciento más. La súper de YPF cuesta 18,45 en la Ciudad y 20,62 en Córdoba, un 11,7 por ciento más cara. Incluso hay diferencias con el conurbano.
Las petroleras justifican esa brecha de precios por cuestiones logísticas debido a las distancias.

Luego del aumento de los combustibles, en la ciudad de Buenos Aires el litro de nafta súper de YPF pasó a costar 18,45 pesos, la premium 20,85, el gasoil común 16,78 y el Infinia diesel 19,28 pesos. Sin embargo, en algunas provincias del norte del país la misma empresa vende la súper a 21,37 pesos y la premium nada menos que a 23,60 pesos. Lo mismo ocurre en el resto de las empresas. De hecho, Shell comercializa la premium a 21,57 pesos en Buenos Aires y a 24,40 pesos en Corrientes, un 13,1 por ciento más.

Las petroleras justifican esa brecha de precios por cuestionen logísticas debido a las distancias que deben atravesar para proveer los combustibles, pero a esa causa se le suma también la mayor libertad histórica que han tenido, y siguen teniendo, para aplicar mayores subas en los lugares donde la repercusión mediática es menor. La consecuencia inmediata es un fuerte impacto en la estructura de costos de las economías regionales, las cuales en muchos casos ya están en crisis.

En Corrientes Capital la petrolera Shell aumentó la nafta súper de 20,59 a 22,23 pesos el litro y la premium, denominada V-Power, de 22,59 a 24,40 pesos. En la misma ciudad, YPF ofrecía ayer la súper a 21,14 pesos y la premium, conocida como “Infinia”, a 23,15 pesos. En Resistencia, las estaciones de Shell subieron el litro de nafta súper de 20,24 a 21,86 pesos y la V- Power de 22,45 a 24,25 pesos; el litro de V-Power Nitro Diésel ascendió de 20,30 a 21,92 y el de Fórmula Diésel se incrementó de 17,30 a 18,68 pesos.

En Córdoba, la súper de YPF trepó de 19,09 a 20,62 pesos, la Infinia de 20,88 a 22,55, el gasoil común de 14,99 a 17,80 y la Infinia diesel de 18,35 a 19,82 pesos. En Shell, en cambio, la súper cuesta 20,97 pesos, la premium 22,95, la diesel común 17,96 y la V-Power Nitro + Diesel 20,57 pesos.

En Santa Fe, la nafta súper trepó de 18,93 a 20,39 pesos, la premium de 20,65 a 22,24, el gasoil de 16,58 a 17,91, mientras que en las estaciones de servicio de Shell la super subió de 19,59 a 21,15 pesos y la V-Power de 21,59 a 23,31 pesos

Las diferencias también se pueden encontrar entre la ciudad de Buenos Aires y el conurbano bonaerense. En varios distritos del segundo cordón, el litro de nafta súper de YPF está cerca de 19 pesos y la premiun supera largamente los 21 pesos y el gasoil borde los 18 pesos. Lo mismo ocurre con Shell que vende la súper a 18,85 en Capital Federal y a unos 30 kilómetros la ofrece a 19,40 pesos, mientras que la premium le remarca 1,5 pesos más y la vende por encima de los 23 pesos.

Dos casos especiales son los de las ciudades fronterizas de Clorinda (Formosa) y Posadas (Misiones). A comienzos de mes, el precio de las naftas cayó allí un 14 por ciento debido a una reducción en el Impuesto a las Transferencias de los Combustibles (ITC) decidida para eliminar las asimetrías con los precios vigentes en Paraguay. En diciembre, por ejemplo, en Posadas YPF cobraba la súper a 19,55 pesos y el 1 de enero la bajó a 17,18 pesos. De ese modo, se buscó desalentar, al menos parcialmente, el cruce por el puente internacional San Roque González de Santa Cruz para llenar el tanque y realizar compras en la ciudad paraguaya de Encarnación. Sin embargo, apenas diez días después la nafta súper subió nuevamente, aunque en menor proporción quedando en 18,55 pesos. En el caso de la premium, el año pasado costaba 21,54 pesos, a comienzos de 2017 bajó a 19,16 y ahora trepó 20,69 pesos. Distinto es el caso del gasoil que a comienzos de año había bajado menos que las naftas y se dio la particularidad de que ahora está prácticamente igual que hace quince días. En diciembre costaba 16,99 pesos, descendió a 15,49 y diez días después aumentó a 16,73 pesos.