Allanaron dos casas en una localidad de Tartagal, encontraron armamento que parece de la resistencia palestina: fusiles, escopetas y hasta una ametralladora antiaérea. Se presume que las armas provendrían del ejército boliviano y estaban en poder de una banda peligrosa de la frontera.

El Nuevo Diario anuncia que la información hasta ahora no circuló por los noticieros oficiales de la policía, entonces la recopilación de datos y testimonios fue realizada por periodistas tartagalenses, esto hace prever que las hipótesis no fueron constatadas, en parte porque se trataría de una no menor banda de gente que se dedica a rubros tales como asaltos grosos y tráfico de estupefacientes.

Los allanamientos se realizaron en la localidad de Piquirenda, 20 kilómetros al norte de Tartagal, el domingo pasado mientras se jugaba la final del mundial. Armas de diferentes calibres, cientos de municiones, una ametralladora antiaérea. Itakas, escopetas recortadas, FAL y armas desarmables, había para todos los gustos.

Las viviendas donde fueron realizados los allanamientos estaban alquiladas por los integrantes de la banda, de los cuáles sólo se pudo detener a uno, de quien se desconoce la identidad. Se sospecha que el resto andaría por tierras bolivianas. A pesar que se detuvieron a varias personas luego del reviente, el resto quedaron libres al no encontrarse pruebas de su implicación. Además fueron secuestrados 25 mil pesos que, también, se sospecha son parte de un botín por el robo un día antes del operativo en Tartagal, del que se llevaron 22 mil pesos.

Secuestro en cuestión: PAG_13_armamaneto